¿Cuánto duelen los negativos?

Los negativos de las beta esperantes pueden ser tan clasificables como los elementos que se meten en la coctelera que las resulta, yo he tenido algunos (já! que light se oye ésto ...algunos, si! algunos) y todos han sido dolorosos pero de distinta forma.

El primer negativo fue mortal, era por partida doble y vino después de varios meses en cama, sangrando y prometiendo más y mejor a cuanto santo había; después del primero ya la tolerancia cambió y "OJO" no es que ya una se hiciese inmune noooooo nada más lejos pero digamos que ya lo habías probado y sabías que existía la posibilidad de que se presentasen de nuevo, no era cuestión de falta de fe o no echarle "ganas" como dicen por estos lados, nada de eso, sencillamente podían suceder y ....sucedían.

Ayer tuve un negativo más, y bueno cariño un sólo embrioncito allá adentro sólo contra el mundo, con tal sólo tres diitas de vida, vos que querías piba??? sugar happens y vaya que lo sé!

Casi como una vez fue costumbre, recibí el diagnóstico de mi beta por teléfono, "estamos en cero" me dijeron, yo solté un taco en versión apta para niña fresa (fresa=snob) y la otra parte al teléfono hizo lo propio, "qué vas a hacer?" SEGUIMOS!!!! fue mi respuesta, así que con la misma miré el reloj ví que casi era la hora en que despierta mi nena de su siesta y me puse las pilas para tenerle a punto su comida, ya tendría tiempo de llorar mi nuevo negativo tarde en la noche, que no se diga que el octavo duele menos que el primero: aquí todos duelen, lo que pasa es que para unos hay más tiempo de duelo que para otros.